Economista estima que economía crecerá sólo 6% en el 2009 por crisis. 

Por crisis internacional, el Perú sólo crecerá 6% en el 2009 y remesas disminuirán en 40%, estima economista Zúñiga

El próximo año el Perú no crecerá 9% sino un 6% producto de la crisis financiera mundial, estimó el economista Javier Zúñiga.

 

Asimismo, advirtió que en el 2009 las remesas al Perú se reducirían en 40%, resultarán afectadas las exportaciones de manufactura, sector agroindustrial y alimentos.

 

“Habrá una reducción del financiamiento internacional o se hará más caro el crédito internacional”, dijo en NACIONAL EN LA NOTICIA.

 

No obstante, Zúñiga señaló que a pesar de la crisis, nuestro país podría conseguir el grado de inversión y así la posibilidad de contar con recursos financieros internacionales a tasas menores.

 

“Cada vez nos acercamos más al grado de inversión. México, Brasil y Chile son los únicos que tienen grado de inversión en América Latina y , probablemente el próximo año podríamos alcanzar el grado de inversión y tener la posibilidad de contar con recursos financieros internacionales a tasas menores”, comentó.

Por otra parte, el economista opinó que la ventaja del proceso recesivo mundial será que el Perú tendrá una inflación en el 2009 menor a la del 2008. “Será de un 4% convirtiéndonos en la economía con la inflación más baja de América Latina”

Artículo encontrado en el diario «La Primera»

Crisis mundial sí golpeará al Perú

Los diarios de España y Europa dedican amplios espacios a la crisis; hablan de derrumbe, catástrofe y del peor escenario desde 1929. Y en el Perú, ¿cómo la vemos?

Tres son los impactos centrales previsibles de la crisis global sobre economías como la peruana:

1. Reducción decisiva de la demanda de productos peruanos por el mercado de Estados Unidos, que ya comenzó y se agudizará el 2009 (año de entrada al TLC), y por extensión a otros que estarán frenando su crecimiento, con caída del valor de las materias primas (que ya también comenzó) y baja en las ventas de productos no tradicionales (agroindustria, confecciones, otros).

2. Presión proteccionista del Estado norteamericano sobre su mercado y sus empresas, que se está expresando en la institucionalización de los “rescates”, lo que en buena cuenta significa que se puede subsidiar, auxiliar y estatizar a los capitalistas en problemas y que por supuesto se querrá reducir este enorme costo, cuando sea posible, trasladándolo a sus competidores a través de trabas de acceso y financiación. El secretario del Tesoro de EE.UU. se ha dirigido a sus pares de otros países para que adhieran al nuevo credo de la intervención, aunque no queda claro aún el mensaje a la periferia, donde la apertura y la desprotección fue un mandato en los 80 y 90.

3.Contracción de los flujos de capital norte-sur, por efecto del debilitamiento de las grandes empresas, la sequía de créditos, el aumento de las tasas impositivas, etc., con una exigencia adicional para atraer la mayor cantidad de remesas de utilidades o retiro de capital de la periferia para mitigar la crisis interna y reducir la pérdida de puestos de trabajo.

La discusión sobre inflación importada o interna, que se vive en el Perú en un contexto de cambios de gran magnitud sobre la arena mundial, suena en verdad al bizantinismo previo a que la realidad nos obligue a nuestro propio viraje. Y los recortes del ministro Valdivieso a las partidas presupuestales, afectando el gasto social, son del tipo de medicina de la abuela (en este caso el FMI) que aplicamos a toda circunstancia, esperando que tenga algún efecto.

El presidente García además tiene normalmente una relación dual con el entorno: por una parte no quiere aceptar que la “excepción peruana” (que crece más que nadie en el mundo, tiene la inflación más baja, las reservas más altas, etc., y que no lo afecta el entorno, dada la magistral política de atraer las inversiones para acá, en vez de pelearse con los inversionistas), ya no jala para adelante, donde los que van a faltar son los caballos de los inversionistas y las carretas del comercio internacional, dañadas por la crisis. Al mismo tiempo, no puede sustraerse a los “consejos” (mandatos) del sistema financiero, a escala internacional y nacional, que está viendo sus propios intereses en cada país, a través de la demanda de ajustes rápidos: niveles de gasto, deuda, crédito interno, etc., que representan riegos para esos intereses.

Raúl Wiener
Unidad de Investigación

Banco Mundial respalda que Perú modere gasto público ante posible agudización de crisis
Probable emisión de bonos demostrará que hay países con riesgo reducido, afirma

• Felipe Jaramillo, director para Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela de la Región de América Latina y el Caribe del Banco Mundial. Foto: ANDINA/Alberto Orbegoso.

• Lima, oct. 23 (ANDINA).- La política de moderación del gasto público que ha iniciado el Gobierno peruano es positiva, pues se necesitan generar ahorros para tenerlos disponibles en caso de que se agudice la crisis financiera, afirmó hoy el Banco Mundial.“Nos ha parecido favorable esta medida en vista de que la crisis mundial es un hecho y Perú aún no ha sido afectado significativamente, por lo que ahora está en posición de ahorrar a fin de prepararse ante escenarios más difíciles”, manifestó el director regional del Banco Mundial para Perú, Bolivia, Ecuador y Venezuela, Felipe Jaramillo.Dijo que la economía nacional sigue creciendo a tasas altas y este es el momento oportuno para adoptar una política conservadora ya que, por la naturaleza compleja de la crisis mundial, es imposible determinar su grado de profundidad.Destacó que Perú y Panamá son las dos economías de América Latina que están mejor posicionadas para enfrentar los shocks externos.En el caso de Perú, mencionó que sus fortalezas radican en la solidez de sus indicadores económicos y la diversificación de sus exportaciones, tanto en productos como en destinos.Indicó que esta mejor situación permitirá que, una vez que pase la crisis, Perú sea una de las dos economías de la región que retomará más rápidamente la senda del crecimiento.“Los efectos en el país han sido leves, no hubo salida de inversionistas, por el contrario, los grandes proyectos de inversión se mantienen, a diferencia de otros países donde hemos visto cancelación de proyectos.”

  Resaltó que el riesgo país de Perú es uno de lo más bajos de la región, por lo que consideró muy interesante la posibilidad de que el Gobierno salga al mercado internacional para emitir bonos, pues ello demostrará que, a pesar de la crisis, hay naciones donde el riesgo es reducido.

  “Es positivo que Perú diversifique sus opciones de financiamiento, ya sea a través de bonos o solicitando préstamos a entidades multilaterales”, comentó Jaramillo.

  En ese sentido, destacó que Perú es uno de los clientes preferenciales del Banco Mundial y cuando lo requiera tendrá acceso a una alta línea de crédito.

  Sin embargo, comentó que en los últimos 14 meses el Gobierno peruano no ha necesitado de estos préstamos en vista de su buena posición económica.

  Finalmente, precisó que el banco tiene a disposición de los países de la región una línea de préstamos muy importante que asciende a 5,500 millones de dólares. aproximadamente.